LA MAFIA DE LOS MANTOS BLANCOS

LA MAFIA DE LOS MANTOS BLANCOS
(Una promesa y un olvido)

La tarde luce increíblemente triste en “El Orfanato Religioso De La Caridad”. Kiliam y Sunny platican ante la incertidumbre de lo que será para ellos el día de mañana; Él le da a ella las manos para intentar consolarla
Cumplirían 18 años, era una de esas extrañas coincidencias, en la que los dos niños cumplieran años, o mejor dicho fecha que ellos escogieran para celebrar tan singular fecha.

Mañana serán mayores, mañana… mañana ¿Qué será de ellos?

Kiliam lleva ahí desde hace no sabe cuánto tiempo Y Sunny está en esa casa desde los 10 años de edad, tiempo suficiente para que recuerde, lo que no quiere recordar «Abusos, abusos y más abusos “tanto aquí como fuera”» es lo que se decía la joven una y otra vez


—El problema es que no sé qué hare con mi vida— Dice el joven Kiliam mirando para el horizonte… Tal vez lo más sensato es rentar un modesto cuarto, creo que me alcanza con mi sueldo de mecánico; Definitivamente seguiré el consejo de Don Luis, mi patrón— Hace una pausa y ahora voltea a ver a los ojos marrones y vidriosos de su querida amiga— hasta este entonces siempre estaba al amparo de las divinas madres del convento
—Lo sé, pero desde mañana yo ya no quisiera estar aquí…. Es más, si por mí fuera desde hace mucho no estaría aquí
— ¿Por qué nunca me has querido decir lo que te pasa?
—Porque no quiero herirte, no quiero involucrarte, ni nada
El joven la abraza con mucho cariño —Me duele que no me tengas tanta confianza
—No es eso… Créeme que no puedo. Pero dime, ¿estás seguro de tus planes?
—Me va más o menos bien en mi trabajo, aprendo rápido a reparar los automóviles… y pues al menos una casa modesta podre tener
—Ojala y pudiera ir contigo— Susurra tristemente
—No me lo digas dos veces ¡Vente conmigo!
—No puedo, creo que lo mejor para mi es convertirme en religiosa

Kiliam hace un chasquido de desaprobación— ¡Eso yo no lo comprendo! No decías nada de eso hasta hace unos pocos días. Siempre hablábamos de amor, de estar juntos ¿Por qué tu cambio?,
—Y te amo de verdad— Exclama la sensible Sunny— pero créeme que lo pensé bien y me gusta la propuesta de la madre superiora
—Pero….
—Calla por favor

Los dos se miran con una cierta tristeza contenida— Pero nos veremos de nuevo ¿Verdad?
—Claro que sí, vendré a visitarte cuantas veces pueda
—Y yo te esperare en mi convento— se toman fuertemente de las manos y van a rezar su oración vespertina.

Esa noche Sunny no quiso hablar como siempre lo hace con Kiliam; (su hermano del alma y desde hace un tiempo novio a escondidas). Ella solo lo miro a los ojos; Como si con esa contemplación pudiera reflejar su tristeza y decirle todo lo que ha guardado con tanto ardor. Pero el muchacho no se queda quieto. Atrae su cuerpo hacía él, y le da un enorme y profundo beso:
— Con esto te demuestro todo lo que he callado ante todos ¡Te amo!
—Kiliam, pero eso no está bien— Dice ella quitándose de sus brazos
— ¿Por qué no? Si no somos familia y ya estamos por ser mayores de edad
—Pero recuerda que mañana me convertiré en novicia ¡No lo hagas más difícil por favor!
—No te entiendo, antes no decías nada de esto
—Lo que pasa es que tengo que hacerlo. Se lo prometí a la madre superiora la última vez que hablamos
—Pero… No puedes negar que me amas ¡Por Dios Sunny! no puedes hacerme eso ¿Qué no recuerdas nuestro pacto?
— ¡Lo siento! —Dice casi al borde de las lágrimas— Es lo mejor para los dos, olvidarme y olvidarte
— ¿Qué te pasa princesa? — Dice abrazándola —Te siento mucho más triste que hace rato ¿Acaso vistes al padre Jeremías? ¿Acaso te ha ofendido? ¿O te ha hecho algo más? He oído rumores y tú sabes de que
—No puedo decir nada— y se separa de nuevo del muchacho que hace esfuerzos por abrazarla y consolarla. La chica trata de ahogar en su alma el torrencial de lágrimas que amenaza con  salir  
—Sunny Dime lo que sea que te haga mal. —Al no escuchar respuesta le dice— cada que ves al sacerdote.  Te pones mal He escuchado rumores pero no estoy seguro de nada. Si algo te lastima dime lo que sea y  hare lo posible por ayudarte.
—Calla por favor…  tu sabes que nos amamos, que siempre nos hemos tenido confianza, recuerda cuando nos juramos amor eterno, que cada que podemos... bueno… tu y yo
— ¡Adiós!

La joven se va casi corriendo hacia uno de los pequeños jardines del orfanato, Kiliam la sigue de lejos, cuando por fin llega junto a ella le besa por el cuello — ¡Que rico hueles!
—Apártate, no podemos estar juntos, es pecado
—No sé porque ahora lo dices si tú y yo ya lo hemos hecho varias veces. —Comienza a  acariciarla tan suave y delicadamente que ella ya no se resiste y corresponde con la misma intensidad. Pero de pronto recuerda algo y dice
—Para por favor… mañana…
—Mañana nada— posa su mano por debajo de las piernas y la acaricia con suma dulzura
— ¡Oh mi amor! si por siempre pudiera disfrutar de tu cariño
—Sabes que si podemos, que nuestro amor es más fuerte que nada
—Detente— y la mano juguetona de él se acerca atrevida a su parte intima mientras que le mordisquea la oreja muy sensualmente
— ¡Eres maravillosa!— dice mientras acaricia sus senos por sobre la blusa

Ella solo comienza a suspirar pero ya no replica. Los besos ardientes de los dos siguen y la humilde ropa que cubre los cuerpos de los huérfanos comienza a desaparecer. La piel bronceada de ella contrasta con el cuerpo blanco del muchacho; acostumbrados a los golpes y moretones de los automóviles; Los dos muchachos delgados y con ligeras señas de desnutrición, se besan, se acarician… hacen el amor lo mejor que su instinto y sus sentimientos les dicen
—No me importa lo que mañana pase, por siempre serás mi amor—Dice entre gemidos
—Y yo por siempre te amare… ¡Oh cielos! — grita de placer al sentir los dientes de su amante en el pezón, quien continua con más pasión al oír sus gemidos

La parte cumbre del clímax se acerca, los dos desnudos y completamente entregados a la pasión se olvidan de todo lo demás… El viento ondea suavemente provocando que la piel de los amantes se erice. El  amor parece que  quieren estallar. Los movimientos de él cada vez son con más fuerza, el cuerpo de la chica se roza con la hierba y de pronto… ella grita— ¡Ay!—
— ¿Qué pasó? ¿Te lastime?
—No... Bueno si…. No es nada… Sigue… No me hagas caso— Dice nerviosa y temerosa de ser descubierta

Pero el  joven que ha aprendido a ser desconfiado en algunas cosas; que sabe de sus sospechas y los rumores que ha oído. No se queda tranquilo, toca sus partes íntimas con disimulo…  como queriendo buscar algo.  Pero la escasa luz del pobre y descuidado jardín no le permite ver nada. Trata de concentrar su atención a su vez en la mirada de su “chica” ella esta tan asustada que no acierta a decir nada
—Ven, vamos a este rincón
—Espera deja me visto
Kiliam no dice nada, la toma de la mano y la jala a un rincón del jardín que es ligeramente más iluminada por la luz de uno de los postes de la calle
—Déjame seguirte tocando— y trata de hacerlo de nuevo
— ¡No! Ya me voy de aquí—  dice quietándole sus manos, pero él la abraza—Tranquila mi amor, solo quiero amarte

El aprendiz de mecánico  con una dulzura que parece salir de nuevo, comienza a besarla y acariciarla por todos lados. Parece que la  ternura vuelve, ella se abandona a su sentimiento y otra vez comienza el  juego amoroso. Kiliam besa la parte más íntima de su novia amorosamente.
 —Oh mi cielo eres maravilloso—

Pero el amante trata de mantener la mayor frialdad posible. Hace acopio de todas sus fuerzas para no perderse por las sensaciones; Quiere mantener la mente fría y poner atención a…lo que sea que tenga que descubrir

A la menor oportunidad voltea a su amada, distingue unas marcas moradas en su costado ¡acaso son marcas de golpes! Acaso el maldito se atrevió a…

« ¡Cabeza fría Kiliam! Mente fría» Piensa ¡Casi se exige!;  comienza a acariciar sus nalgas, mientras mira lo mejor que puede cada detalle de su cuerpo ¡Hay algunas estampas de golpes en su espalda!
— ¡Como se atrevió el maldito ya no a tocarte! Sino a maltratarte— Grita furioso, la chica lo mira con miedo— ¿Por qué no me dijiste antes que ese idiota te violaba?
—Por Dios Kiliam cálmate yo… este me golpee en un lugar
—No me engañes nena, ya lo sospechaba y ahorita lo acabo de comprobar
—no hagas esto más difícil— Dice con miedo y lo abraza tratando de calmar todo
Pero el se separa y le dice mirándola a los ojos:
—No es la primera vez ¿verdad?
Como toda respuesta la  chica comienza a llorar desconsolada
—Perdóname
—No… no, te de esto nunca  pidas perdón— Dice volviendo a la calma — Yo te amo y me duele lo que está pasando. Si tú me lo hubieras dicho yo…
—Por eso no te decía nada, por tu propia seguridad. Te amo, De verdad te amo… pero ahora estoy  manchada
—Y yo a ti te amo, te quiero como sea y no, no estás manchada, ese idiota se aprovechaba de ti y tu inocencia —da un hondo suspiro y pregunta — ¿Te sodomizó?
— ¿Qué es eso?
— ¿Te penetró por… el ano? — pregunta con dificultad.
—¿Por qué lo preguntas?
—Por las marcas en tu costado

La chica tiembla, tal vez sea de miedo o recordar todo. Él lleno de rabia y dolor acerca su mano a la entrada del orificio negro de la chica, provocando un respingo en ella… alcanza a sentir humedad ¡Manchas de sangre!

La chica al ver que se descubrió todo y ante la pena y la  vergüenza comienza a llorar otra vez. Kiliam ve a su chica deshecha emocionalmente, se calma y la abraza quien no deja de llorar y se recarga sobre su pecho
— ¿Ahora comprendes porque me quiero hacer novicia? Quiero alejarme de ese señor tan horrible…. ya me canse de que se posesione de mi cuerpo, de sus ultrajes ¡De todo!
— ¿es la primera vez que lo hace?
—Por… atrás… si—
—Pero ¿ya te había golpeado? ¿Cuántas veces ha abusado sexualmente de ti?
—Me da miedo, me da vergüenza hablar de ello
—Vamos… Confía en mí
—Sí, varias veces…—Toma aire y continua hablando, apenas y se escucha lo que dice—Ya lleva mucho tiempo de todo esto. Comenzó tocándome, luego se decidió a penetrarme ¡Oh Dios! Fue terrible, a  veces me tocaba y metía objetos que no conozco, alguna veces el mismo profanaba los objetos religiosos por su misma perversidad — Llora— Muchas veces mientras abusaba de mí me ponía a rezar pidiéndole perdón a Dios por ser yo una pecadora. Me decía después cosas muy  feas ¡Todo era terrible!
— ¡Lo voy a matar!— exclama furioso el amante— No es justo que te quiera destrozar de esa manera—  y corre por su ropa
—Por favor mi amor—  lo alcanza la desnuda chica— Por eso no te había dicho nada, por eso siempre estaba callada, no quiero que te lastime ¡No quiero que acabe con tu vida! Si uno de los dos va a sufrir, quiero ser yo y no tú
—Pero eso no es justo mi princesa ¡No puede despedazarte la vida! Prefiero morir o ir a la cárcel que permitir que te haga todo esto
— ¡No! Por favor Me muero si te pasa algo

Silencio total ante el llanto, la desesperación y la impotencia. Los dos terminan de vestirse. Kiliam se sienta en el suelo sin saber que decir. ¡Rabia, impotencia, Ganas de acabar con el maldito sistema! ¿Cómo es posible que un violador este a cargo de la supervisión de una serie de orfanatos y conventos? ¿Acaso nadie lo ha denunciado? Y sobre todo ¿Cómo es posible que no se diera cuenta antes de que ese demonio abusaba de su chica? Se culpa por estar tan ciego y no darse cuenta antes

La chica completamente triste se cerca al muchacho, tal vez buscando un poco de apoyo y seguridad — ¡Perdóname!- Exclama casi llorando
— ¡Perdonarte! ¿De qué? Si tú no has hecho nada malo
—Lo que pasa es que me dice el padre Jerónimo que mi cuerpo incita al pecado, que es del demonio y de esa manera borrara las señales de mi delito 
— ¿Está loco ese maldito? Tú eres la niña más dulce y tierna que conozco
—Pero es que…
—Mira mi pequeña, tú sabes que ya llevo un par de años trabajando con Don Raúl, me he dado cuenta de la vida que hay fuera de este lugar… No todo es pecado o rezos, ni plegarias como nos han hecho creer. ¡Créeme que tú no tienes la culpa de nada!
— ¿Entonces?
—El padre Jerónimo es un maldito engendro que lo único que quiere es abusar y engañar a niñas hermosas e inocentes como tú
— ¿De verdad?
—Créeme que hablo en serio, nunca te mentiría
—Por eso quiero irme al convento, para que nunca me vuelva a tocar
—Mejor cásate conmigo
—El padre Jerónimo me dice que no… Que yo no debo de tocar a  ningún otro hombre— hace una pausa y lo mira a los ojos— Pero no le creo, no quiero creerle ¡Tú eres un hombre bueno y  te quiero de verdad! Como quisiera ser solo tuya pero no veo manera de salir de aquí
— Y no debes de hacerle caso a ese demonio. Él es el verdadero demonio
—Le tengo mucho miedo ¿y si me voy contigo y nos hace algo malo?
—Ya sabré como detenerlo
—No quiero que te haga nada
—Te prometo que no nos dañara— Y le besa la frente

Pasan unos minutos abrazados sin decir nada. Mientras que ella en su delicadeza piensa cual es el mejor camino… pero en los pensamientos de él solo está la palabra “Venganza”
—Kiliam
—Dime mi amor
—La verdad no sé qué pasara mañana, pero lo cierto es que quiero hacer el amor contigo. No sé si sea o no la  última vez… Quiero sentir tus besos y tu ternura, tú cuerpo en el mío ¡Quiero que nos amemos por última vez!
—Pero tu cuerpo esta lastimado y no quiero…

La muchacha ya no lo deja seguir hablando, se pone frente a él y le da un profundo beso. No comprende si realmente lo que quiere es sentir su amor. O solo es un deseo de su mente torturada; ante los varios abusos sexuales del Padre Jerónimo y el amor puro que le da su novio Kiliam

Los besos de ella surten efecto, van calmando el coraje interno del muchacho, poco a poco va aceptando y convierte el enojo en deseo sexual. Se retiran y buscan el lugar más oscuro para asegurase de no ser descubiertos… Aunque… Parece que alguien desde lejos estuvo un tiempo considerable viéndolos desde las sombras; tal vez alcanzo a escuchar algo, tal vez no... Se va sin decir nada

Los chicos por su parte no hacen más que  desatar toda su pasión. Amor que muchos  les han enseñado que es oculta y un aparente pecado. Pero que para ellos los hace ir al paraíso

Ahora los besos son cálidos y profundos, vehementes y con palabras que van desde lo más tierno hasta lo más  fogoso. El hombre parece necesitado de darle todo el amor que a ella pudiera faltarle, y ella a su vez intenta sembrar un paraíso
— ¡Me volverás loca!
—Oh mi cielo, por siempre viviremos de este loco y profundo amor

Mientras que las prendas desaparecen, las manos de los dos descubren sus cuerpos como si fuera la primera vez que se tocan  “Te amo” dice uno “te deseo con toda la fuerza de mí ser” es la respuesta.

Desnudos por fin, se recuestan sobre la  hierba, buscando la posición y le lugar más placentero para que la chica no sufra por los golpes…El olor a frescura y ritmo de la noche se acompasa con la pasión de ambos
—Oh mi cielo
—Oh mi vida Júrame que siempre estarás conmigo— Dice envuelto en pasión Kiliam
—No puedo— dice entre gemidos y loca por la excitación— Esta debe de ser la última vez, no quiero que te hagan daño las personas de Jerónimo

El ya no le contesta nada, delirante por la adrenalina sexual, un plan perverso se le atraviesa «En la guerra y el amor todo se vale» ¿No?:

Besa y acaricia sus senos con gracia y delicadeza. Quiere llevarla al éxtasis poco a poco, tranquilo, sin prisas…Comienza a penetrarla, suave… sabe cómo llevarla al éxtasis… el ritmo comienza más rápido… la adrenalina y el fuego comienza a crecer… Otro poco más rápido
— ¡Oh cielos! —Grita ella
«Es el momento» piensa. Haciendo acopio de su voluntad saca su pene de entre su húmeda vagina— Así no podremos continuar
—No hagas eso— Se exaspera la fémina por su placer truncado— ¿Qué te pasa?
—Lo siento pero se acabó el juego— dice mirándola a los ojos— No quiero continuar si hoy será la ultima vez
—Sigue por favor, ya no puedo detener este fuego que hay en mi interior
—Solo lo hare si me juras que siempre estaremos juntos y seguirás amándome— le habla tratando de aparentar una gran indiferencia
—Oh Kiliam creí que ya te lo había explicado

Intenta besarlo de nuevo. Pero él sabe que se juega el todo por el todo. Hace uso de todas sus fuerzas y se retira ¡Cuantas ganas tiene de estar con ella! :—Ya te dije cuál es la condición que te pongo…
— ¡No seas malo conmigo! ¡Tú no!
—Lo siento mi vida, pero las cosas son así—Dice acariciando su entrepierna para provocar una mayor excitación en la chica
—Está bien— lloriquea la pobre chica—Pero por favor no te detengas
—Júramelo— y acaricia su vagina para darle placer
—Te lo juro pero no te detengas

El muchacho comienza a besarla de nuevo… la pasión está al borde, sus cuerpos compenetrados uno sobre otro sienten la lujuria y el amor de una relación aparentemente prohibida

¡Besos! “¡Te amos!, fuego,  deseo, lujuria… Amor y pasión… Hacen estallar todo en un potente orgasmo. Se dan un gran beso. Reiteran que siempre estarán juntos  a pesar de todo y en camino a sus dormitorios hacen planes de irse mañana al cuarto que el muchacho ha visto y piensa rentar.

La oscuridad es profunda en la habitación del chico, este no puede dormir, su mente está concentrada en el padre Jeremías ¿venganza? No comprende cuantos minutos ¿U horas? Han pasado;  escucha unos ruidos en los pasillos…..

La mañana llega y mientras que la chica es obligada a ir al convento de monjas… Kiliam… Esta con algunos golpes encerrado en un cuarto de castigo……….

— ¡Kiliam! quiero Hablar contigo— Dice la madre superiora quien en ese momento abre la puerta,
Él se vuelve y solo  pregunta — ¿Sunny está bien?
—Está bien, ya  me encargue de eso, pero quiero hablar contigo de algo muy  importante y grave— se sienta junto al muchacho en la rustica banca del pequeño cuarto descuidado, sin ventilación y mal iluminado.
—Este cuarto es horrible, deberíamos ir a la dirección—

Como toda respuesta Kiliam baja la cabeza ¿Tendría caso hablar con ella? ¿Le creerá? Y la pregunta más importante ¿Se pondrá de lado de él o del nefasto sacerdote?
El muchacho no le dice nada más, por lo que ella continua— Me dijeron que tu intentaste agredir al padre Jeremías. Pero yo te conozco desde que eras un bebe. Tú no eres violento ¿Qué te pasó?
—Solo… solo… No puedo hablar. Además que no me  sé si me crea— Dice recordando las amenazas de la madrugada anterior.

La monja lo mira con comprensión. —Sabes que siempre trato de ser justa, además me ha tocado ver muchas cosas en la vida, no temas. Hoy muy temprano hable son Sunny y ella está bien. Ahora lo que me interesa es hablar contigo ¿Sabías que se quiso ir al convento para que tu estés mejor?
—Lo que hizo fue un crimen contra ella misma
—Una mujer desesperada, sola y amenazada puede hacer cosas inesperadas. Pero allá estará bien. ¿Sabías que me  dijo de su intención de ser novicia?
—Eso no es cierto, ella se fue solo para dejar atrás al padre Jeremías
—Yo veré por el bienestar de ustedes, pero te repito que quiero hablar contigo, quiero  saber lo que en realidad pasó— Dice con dulzura la Madre superiora, mientras toca la cabeza de su “hijo postizo” — Sé y tengo algunas sospechas, pero necesito hablar contigo. No me gusta este horrendo lugar. Ven vamos a la dirección. Haya estarás más tranquilo— le da un beso en la frente al joven que está bastante desesperado

El joven sigue a la muchas veces estricta y regañona, y otras dulce y comprensiva Hermana María, en esos momentos no piensa en los golpes de su cuerpo, solo trata de descifrar como es que estaba ayer el sacerdote al que tanto odia y con algunos acompañantes

—Entra— Le dice con su seriedad habitual. Se vuelve con otra de las religiosas que le ayuda y dice— tráeme en una bandeja el desayuno para este  joven. No porque tenga que reprenderlo severamente, significa que no comerá

El joven entra a la rustica dirección, habitación que al igual que el resto del orfanato es muy modesta y tiene lo básico para subsistir. El edificio data de la época de la colonia española. Funcionó como convento hasta hace aproximadamente 5 décadas que fue cuando lo convirtieron en “Casa Hogar”. Siempre se ha caracterizado por el buen trato de las religiosas para con los niños, hasta…hasta hace un par de años que fue cuando el padre Jeremías comenzó con labores de supervisión. Tiempo en el cual… empezó la tristeza para muchas personas

El joven de rostro blanco y cabello color caoba se sienta en la silla esperando lo que él cree será una severa represalia
— ¿Qué tanto amas a Sunny?
—Con todo mi corazón se lo aseguro
— Me dijeron que hace unas semanas quisiste agredir al padre Jeremías
—Sí, lo hice— Dice firmemente— Pero es por… nada
— ¿Qué pasó? Siempre te he considerado un buen alumno y respetuoso, tú y Sunny eran o son los eternos hermanos, pero… Últimamente has cambiado mucho y eso me preocupa
Kiliam guarda Silencio, no esperaba ese comentario
— ¿No tienes algo que decir en tu favor?
—Yo… Bueno,
—Habla con confianza— lo anima la religiosa— te aseguro que te daré un trato justo y correcto. Sabes que te quiero mucho
—Bueno… éramos muy unidos, pero, desde hace un par de meses que nos enamoramos y decidimos estar juntos en secreto….
—Entonces no es la primera vez que tienen sexo
— ¿Cómo lo supo?
—Solo lo sé— Dice con una sonrisa — ¿Qué tanto amas a Sunny?
— La amo de verdad, desde hace ya muchos meses pero hasta hace medio año me anime a declararle mi amor y fui correspondido.
—Cuéntame todo, y también dime porque más o menos en ese tiempo quisiste golpear al padre Jerónimo
—Está bien… Le diré todo— Dice resignado— De todos modos hoy oficialmente seré mayor de edad y saldré de aquí para siempre
—Empieza
—Usted sabe que Ella y yo siempre hemos sido muy amigos, nos comenzamos a contar todo y… No sé exactamente qué es lo que quiere que le cuente de mí. Es sencillamente una historia de amor adolescente como cualquier otra
—Entonces platícame del padre Jeremías y tú
—No se ofenda madre, pero si hoy me van a correr me importa hablar muy poco de ese hombre al que detesto tanto
—Tú no eres el único que lo detesta— le confiesa en tono conciliador— Sé que ha hecho muchas cosas indebidas, y lo único que quiero es proteger a mis hijos (dice refiriéndose a los niños que tiene bajo su tutela)
—Lo que pasa es que a ella una vez la descubrí llorando dentro del cuarto de herramientas, nunca me dijo que le había pasado, pero siempre que se acercaba él comenzaba a  temblar. Pero En ese entonces no, lo supe hasta ayer en la noche
—Y por eso lo quisiste golpear en la madrugada ¿no?
Él solo le mantiene la mirada
—Te cuento que yo quiero mandar a varios de mis niños a otro lugar, o aún mejor sacar al padre Jerónimo de aquí, pero para eso necesito algunos testimonios.

Al chico se le ilumina la cara y decidido comienza a hablar:
—Sunny me contó algunas cosas, sé que el padre Jerónimo cometió atropellos con ella y otras chicas, se dice que también con algunas monjas. Ayer no pude dormir y fue cuando vi al padre Jerónimo fuera, entonces me adentre a su oficina, descubrí una serie de documentos y una libreta que guarde conmigo…  Después llego junto con algunos hombres, me golpearon y creo que recuperaron todo. Pero alcance a leer que ha hecho sus atropellos en reiterada ocasiones. Parece que…— Quiere hablar, pero le tiemblan las manos de coraje— Es más detestable de los que muchos creen

—Cuéntame de la primera vez que lo quisiste agredir
—Una tarde estábamos ella y yo en el jardín cuando el señor ese llegó, hice acopio de todas mis fuerzas por no hacer nada, pues en ese entonces desconocía la magnitud del daño… Cuando él le dijo que quería mostrarle unas cosas ella comenzó a temblar. Yo me ofrecí como acompañante, pero el alego que necesitaba verla sola. Su prepotencia comenzó y cuando la jalo del brazo ahí yo ya no aguante, le refute que no lo hiciera. Nos hicimos de palabras y… bueno lo demás ya lo conoce usted
—Sí, ya veo— Dice pensativa
—Después de eso me amenazó. pero yo no baje la guardia, seguí siendo inseparable de ella. Pero en las noches cuando yo no la podía cuidar por la diferencia de cuartos, creo que él la busco y ¡maldito bastardo! La trató como nunca la había tratado, ayer le varios golpes y…Ahora lo único que quiero es verla y asegurarme que ella está bien
—Cálmate— La madre superiora lo mira con compasión— Tú no eres el único que quiere hacer algo contra él. —pero cuéntame que es lo que harás si la ves.
—Convencerla de que se case conmigo, de alguna manera la podre mantener con mi trabajo
—No todo es tan fácil como lo dices Kiliam, ella me ha confesado su deseo de ser novicia, incluso hace unos días que se lo pregunte por última vez
—Pero ella me ama, estoy seguro que ella esta presionada por Jeremías
—No digas cosas que no sabes, sabes que siempre les he tenido mucho cariño, a ti en especial
—Si… sé que usted es… como mi madre— Y dice esto con un acento diferente
Los ojos de ella brillan y ya no puede decirle nada más
—Por favor, ella es mi única familia y nos amamos
La madre superiora no puede decirle nada más. Escribe una dirección en el papel y se lo da— Si logras convencerla de que se case contigo dale esta carta a la encargada. Es su liberación como Novicia
—Gracias
—Te aconsejo que si la convences se vayan un poco lejos, del padre Jerónimo

Después de una gran silencio Kiliam Continua —Madre… Usted ¿Por qué no hizo algo más por evitar los abusos de ese sacerdote?
—No todo es tan fácil o tan simple como parece— Cierra los ojos
— ¿Acaso a usted también?
—No creo que sea conveniente hablar de ello. Él no es el único abusador del Clero
— ¿Qué?
—Muchas personas creemos que de manos de la religión encontraremos la paz pérdida, pero en el fondo esta Iglesia no es más que una de las poderosas organizaciones a nivel mundial; Abundan los casos de abusos, de corrupción, tráfico de influencias, incluso se hacen tratos con otros tipos de mafias
—El padre Jerónimo no solo lo ha hecho con tu novia… ya son varias las jovencitas que han caído
— ¿Y por qué no lo denuncian a las autoridades?
— ¿Crees que les interese? El estado tiene nexos con el Clero. Están aliados y entre los dos gozan de estos beneficios
—Algo así sabía, pero no creí que la relación fuera tan grande
—Lo que tú puedas ver seria solo la punta del Iceberg

La madre superiora cerró los ojos y le dijo— La verdad es que Sunny hace varios días vino a contarme que estaba muy desesperada, esa vez el padre Jerónimo llegó mucho más lejos, parece que cada vez que estaba con ella la trataba peor. Le estaba rompiendo el alma

El joven parece que está a punto de explotar de coraje— Dígame lo que sabe por favor—
—Ella ya no soportaba más, por eso mismo le dije que el día que se hiciera mayor de edad la mandaría al convento. Hoy en la madrugada estuvimos hablando varias horas. Me conto de su miedo, del amor que se tienen y que nunca te dijo abiertamente para no afectarte ni involucrarte. Lo que hizo fue una prueba de amor.

La madura religiosa hace una pausa y le dice —Pensándolo bien, creo que mejor tendré otro otros planes para ti. Por eso hoy quise hablar contigo, quería estar segura de lo que piensas y de lo que sabes— En tono más serio le dice— Te estimo y admiro por todo lo que has hecho. Y por lo mismo te ayudare. Toma esta otra carta y habla con la persona que escribiré en este papel. No dejes que nadie lo vea, además le pediré si te puede ver ahora mismo. El sabrá qué hacer con ustedes dos
— ¡Gracias! —Dice sin estar completamente seguro de que le entendió

Ella le da un fuerte abrazo y le dice— Lo más seguro es que esta será la última vez que nos veremos, al menos en estas condiciones. Ahora recuerda que te acabo de regañar y tu indignado te vas del orfanato— le guiña el ojo— Espera un momento ahora vuelvo

Demasiada información, demasiado misterio para tan poco tiempo. Kiliam se queda estupefacto ¿Acaso es lo que la religiosa le quiso decir?

Dos horas más tarde el muchacho se presenta con la persona que le dijo la religiosa, habló unas breves palabras con él. Y este solo le dijo
—Tú tendrás otra identidad y tu pareja tendrá otra vida— Le dice con una seriedad absoluta
—A cambio de que
—A cambio de que me ayudes a transportar algo especial
— ¿…Usted está hablando de crimen organizado?
—Te estoy hablando de un modo nuevo de vida sin los abusos del padre Jeremías… Además, puede que pronto llegue su final. ¿Aceptas ser parte de mi organización?
—Acepto— Y centra su atención en el arma de fuego que porta el hombre de negro




 LA MAFIA DE LOS MANTOS BLANCOS
(Una promesa y un olvido)

La tarde luce increíblemente triste en “El Orfanato Religioso De La Caridad”. Kiliam y Sunny platican ante la incertidumbre de lo que será para ellos el día de mañana; Él le da a ella las manos para intentar consolarla
Cumplirían 18 años, era una de esas extrañas coincidencias, en la que los dos niños cumplieran años, o mejor dicho fecha que ellos escogieran para celebrar tan singular fecha.

Mañana serán mayores, mañana… mañana ¿Qué será de ellos?

Kiliam lleva ahí desde hace no sabe cuánto tiempo Y Sunny está en esa casa desde los 10 años de edad, tiempo suficiente para que recuerde, lo que no quiere recordar «Abusos, abusos y más abusos “tanto aquí como fuera”» es lo que se decía la joven una y otra vez

—El problema es que no sé qué hare con mi vida— Dice el joven Kiliam mirando para el horizonte… Tal vez lo más sensato es rentar un modesto cuarto, creo que me alcanza con mi sueldo de mecánico; Definitivamente seguiré el consejo de Don Luis, mi patrón— Hace una pausa y ahora voltea a ver a los ojos marrones y vidriosos de su querida amiga— hasta este entonces siempre estaba al amparo de las divinas madres del convento
—Lo sé, pero desde mañana yo ya no quisiera estar aquí…. Es más, si por mí fuera desde hace mucho no estaría aquí
— ¿Por qué nunca me has querido decir lo que te pasa?
—Porque no quiero herirte, no quiero involucrarte, ni nada
El joven la abraza con mucho cariño —Me duele que no me tengas tanta confianza
—No es eso… Créeme que no puedo. Pero dime, ¿estás seguro de tus planes?
—Me va más o menos bien en mi trabajo, aprendo rápido a reparar los automóviles… y pues al menos una casa modesta podre tener
—Ojala y pudiera ir contigo— Susurra tristemente
—No me lo digas dos veces ¡Vente conmigo!
—No puedo, creo que lo mejor para mi es convertirme en religiosa

Kiliam hace un chasquido de desaprobación— ¡Eso yo no lo comprendo! No decías nada de eso hasta hace unos pocos días. Siempre hablábamos de amor, de estar juntos ¿Por qué tu cambio?,
—Y te amo de verdad— Exclama la sensible Sunny— pero créeme que lo pensé bien y me gusta la propuesta de la madre superiora
—Pero….
—Calla por favor

Los dos se miran con una cierta tristeza contenida— Pero nos veremos de nuevo ¿Verdad?
—Claro que sí, vendré a visitarte cuantas veces pueda
—Y yo te esperare en mi convento— se toman fuertemente de las manos y van a rezar su oración vespertina.

Esa noche Sunny no quiso hablar como siempre lo hace con Kiliam; (su hermano del alma y desde hace un tiempo novio a escondidas). Ella solo lo miro a los ojos; Como si con esa contemplación pudiera reflejar su tristeza y decirle todo lo que ha guardado con tanto ardor. Pero el muchacho no se queda quieto. Atrae su cuerpo hacía él, y le da un enorme y profundo beso:
— Con esto te demuestro todo lo que he callado ante todos ¡Te amo!
—Kiliam, pero eso no está bien— Dice ella quitándose de sus brazos
— ¿Por qué no? Si no somos familia y ya estamos por ser mayores de edad
—Pero recuerda que mañana me convertiré en novicia ¡No lo hagas más difícil por favor!
—No te entiendo, antes no decías nada de esto
—Lo que pasa es que tengo que hacerlo. Se lo prometí a la madre superiora la última vez que hablamos
—Pero… No puedes negar que me amas ¡Por Dios Sunny! no puedes hacerme eso ¿Qué no recuerdas nuestro pacto?
— ¡Lo siento! —Dice casi al borde de las lágrimas— Es lo mejor para los dos, olvidarme y olvidarte
— ¿Qué te pasa princesa? — Dice abrazándola —Te siento mucho más triste que hace rato ¿Acaso vistes al padre Jeremías? ¿Acaso te ha ofendido? ¿O te ha hecho algo más? He oído rumores y tú sabes de que
—No puedo decir nada— y se separa de nuevo del muchacho que hace esfuerzos por abrazarla y consolarla. La chica trata de ahogar en su alma el torrencial de lágrimas que amenaza con  salir  
—Sunny Dime lo que sea que te haga mal. —Al no escuchar respuesta le dice— cada que ves al sacerdote.  Te pones mal He escuchado rumores pero no estoy seguro de nada. Si algo te lastima dime lo que sea y  hare lo posible por ayudarte.
—Calla por favor…  tu sabes que nos amamos, que siempre nos hemos tenido confianza, recuerda cuando nos juramos amor eterno, que cada que podemos... bueno… tu y yo
— ¡Adiós!

La joven se va casi corriendo hacia uno de los pequeños jardines del orfanato, Kiliam la sigue de lejos, cuando por fin llega junto a ella le besa por el cuello — ¡Que rico hueles!
—Apártate, no podemos estar juntos, es pecado
—No sé porque ahora lo dices si tú y yo ya lo hemos hecho varias veces. —Comienza a  acariciarla tan suave y delicadamente que ella ya no se resiste y corresponde con la misma intensidad. Pero de pronto recuerda algo y dice
—Para por favor… mañana…
—Mañana nada— posa su mano por debajo de las piernas y la acaricia con suma dulzura
— ¡Oh mi amor! si por siempre pudiera disfrutar de tu cariño
—Sabes que si podemos, que nuestro amor es más fuerte que nada
—Detente— y la mano juguetona de él se acerca atrevida a su parte intima mientras que le mordisquea la oreja muy sensualmente
— ¡Eres maravillosa!— dice mientras acaricia sus senos por sobre la blusa

Ella solo comienza a suspirar pero ya no replica. Los besos ardientes de los dos siguen y la humilde ropa que cubre los cuerpos de los huérfanos comienza a desaparecer. La piel bronceada de ella contrasta con el cuerpo blanco del muchacho; acostumbrados a los golpes y moretones de los automóviles; Los dos muchachos delgados y con ligeras señas de desnutrición, se besan, se acarician… hacen el amor lo mejor que su instinto y sus sentimientos les dicen
—No me importa lo que mañana pase, por siempre serás mi amor—Dice entre gemidos
—Y yo por siempre te amare… ¡Oh cielos! — grita de placer al sentir los dientes de su amante en el pezón, quien continua con más pasión al oír sus gemidos

La parte cumbre del clímax se acerca, los dos desnudos y completamente entregados a la pasión se olvidan de todo lo demás… El viento ondea suavemente provocando que la piel de los amantes se erice. El  amor parece que  quieren estallar. Los movimientos de él cada vez son con más fuerza, el cuerpo de la chica se roza con la hierba y de pronto… ella grita— ¡Ay!—
— ¿Qué pasó? ¿Te lastime?
—No... Bueno si…. No es nada… Sigue… No me hagas caso— Dice nerviosa y temerosa de ser descubierta

Pero el  joven que ha aprendido a ser desconfiado en algunas cosas; que sabe de sus sospechas y los rumores que ha oído. No se queda tranquilo, toca sus partes íntimas con disimulo…  como queriendo buscar algo.  Pero la escasa luz del pobre y descuidado jardín no le permite ver nada. Trata de concentrar su atención a su vez en la mirada de su “chica” ella esta tan asustada que no acierta a decir nada
—Ven, vamos a este rincón
—Espera deja me visto
Kiliam no dice nada, la toma de la mano y la jala a un rincón del jardín que es ligeramente más iluminada por la luz de uno de los postes de la calle
—Déjame seguirte tocando— y trata de hacerlo de nuevo
— ¡No! Ya me voy de aquí—  dice quietándole sus manos, pero él la abraza—Tranquila mi amor, solo quiero amarte

El aprendiz de mecánico  con una dulzura que parece salir de nuevo, comienza a besarla y acariciarla por todos lados. Parece que la  ternura vuelve, ella se abandona a su sentimiento y otra vez comienza el  juego amoroso. Kiliam besa la parte más íntima de su novia amorosamente.
 —Oh mi cielo eres maravilloso—

Pero el amante trata de mantener la mayor frialdad posible. Hace acopio de todas sus fuerzas para no perderse por las sensaciones; Quiere mantener la mente fría y poner atención a…lo que sea que tenga que descubrir

A la menor oportunidad voltea a su amada, distingue unas marcas moradas en su costado ¡acaso son marcas de golpes! Acaso el maldito se atrevió a…

« ¡Cabeza fría Kiliam! Mente fría» Piensa ¡Casi se exige!;  comienza a acariciar sus nalgas, mientras mira lo mejor que puede cada detalle de su cuerpo ¡Hay algunas estampas de golpes en su espalda!
— ¡Como se atrevió el maldito ya no a tocarte! Sino a maltratarte— Grita furioso, la chica lo mira con miedo— ¿Por qué no me dijiste antes que ese idiota te violaba?
—Por Dios Kiliam cálmate yo… este me golpee en un lugar
—No me engañes nena, ya lo sospechaba y ahorita lo acabo de comprobar
—no hagas esto más difícil— Dice con miedo y lo abraza tratando de calmar todo
Pero el se separa y le dice mirándola a los ojos:
—No es la primera vez ¿verdad?
Como toda respuesta la  chica comienza a llorar desconsolada
—Perdóname
—No… no, te de esto nunca  pidas perdón— Dice volviendo a la calma — Yo te amo y me duele lo que está pasando. Si tú me lo hubieras dicho yo…
—Por eso no te decía nada, por tu propia seguridad. Te amo, De verdad te amo… pero ahora estoy  manchada
—Y yo a ti te amo, te quiero como sea y no, no estás manchada, ese idiota se aprovechaba de ti y tu inocencia —da un hondo suspiro y pregunta — ¿Te sodomizó?
— ¿Qué es eso?
— ¿Te penetró por… el ano? — pregunta con dificultad.
—¿Por qué lo preguntas?
—Por las marcas en tu costado

La chica tiembla, tal vez sea de miedo o recordar todo. Él lleno de rabia y dolor acerca su mano a la entrada del orificio negro de la chica, provocando un respingo en ella… alcanza a sentir humedad ¡Manchas de sangre!

La chica al ver que se descubrió todo y ante la pena y la  vergüenza comienza a llorar otra vez. Kiliam ve a su chica deshecha emocionalmente, se calma y la abraza quien no deja de llorar y se recarga sobre su pecho
— ¿Ahora comprendes porque me quiero hacer novicia? Quiero alejarme de ese señor tan horrible…. ya me canse de que se posesione de mi cuerpo, de sus ultrajes ¡De todo!
— ¿es la primera vez que lo hace?
—Por… atrás… si—
—Pero ¿ya te había golpeado? ¿Cuántas veces ha abusado sexualmente de ti?
—Me da miedo, me da vergüenza hablar de ello
—Vamos… Confía en mí
—Sí, varias veces…—Toma aire y continua hablando, apenas y se escucha lo que dice—Ya lleva mucho tiempo de todo esto. Comenzó tocándome, luego se decidió a penetrarme ¡Oh Dios! Fue terrible, a  veces me tocaba y metía objetos que no conozco, alguna veces el mismo profanaba los objetos religiosos por su misma perversidad — Llora— Muchas veces mientras abusaba de mí me ponía a rezar pidiéndole perdón a Dios por ser yo una pecadora. Me decía después cosas muy  feas ¡Todo era terrible!
— ¡Lo voy a matar!— exclama furioso el amante— No es justo que te quiera destrozar de esa manera—  y corre por su ropa
—Por favor mi amor—  lo alcanza la desnuda chica— Por eso no te había dicho nada, por eso siempre estaba callada, no quiero que te lastime ¡No quiero que acabe con tu vida! Si uno de los dos va a sufrir, quiero ser yo y no tú
—Pero eso no es justo mi princesa ¡No puede despedazarte la vida! Prefiero morir o ir a la cárcel que permitir que te haga todo esto
— ¡No! Por favor Me muero si te pasa algo

Silencio total ante el llanto, la desesperación y la impotencia. Los dos terminan de vestirse. Kiliam se sienta en el suelo sin saber que decir. ¡Rabia, impotencia, Ganas de acabar con el maldito sistema! ¿Cómo es posible que un violador este a cargo de la supervisión de una serie de orfanatos y conventos? ¿Acaso nadie lo ha denunciado? Y sobre todo ¿Cómo es posible que no se diera cuenta antes de que ese demonio abusaba de su chica? Se culpa por estar tan ciego y no darse cuenta antes

La chica completamente triste se cerca al muchacho, tal vez buscando un poco de apoyo y seguridad — ¡Perdóname!- Exclama casi llorando
— ¡Perdonarte! ¿De qué? Si tú no has hecho nada malo
—Lo que pasa es que me dice el padre Jerónimo que mi cuerpo incita al pecado, que es del demonio y de esa manera borrara las señales de mi delito 
— ¿Está loco ese maldito? Tú eres la niña más dulce y tierna que conozco
—Pero es que…
—Mira mi pequeña, tú sabes que ya llevo un par de años trabajando con Don Raúl, me he dado cuenta de la vida que hay fuera de este lugar… No todo es pecado o rezos, ni plegarias como nos han hecho creer. ¡Créeme que tú no tienes la culpa de nada!
— ¿Entonces?
—El padre Jerónimo es un maldito engendro que lo único que quiere es abusar y engañar a niñas hermosas e inocentes como tú
— ¿De verdad?
—Créeme que hablo en serio, nunca te mentiría
—Por eso quiero irme al convento, para que nunca me vuelva a tocar
—Mejor cásate conmigo
—El padre Jerónimo me dice que no… Que yo no debo de tocar a  ningún otro hombre— hace una pausa y lo mira a los ojos— Pero no le creo, no quiero creerle ¡Tú eres un hombre bueno y  te quiero de verdad! Como quisiera ser solo tuya pero no veo manera de salir de aquí
— Y no debes de hacerle caso a ese demonio. Él es el verdadero demonio
—Le tengo mucho miedo ¿y si me voy contigo y nos hace algo malo?
—Ya sabré como detenerlo
—No quiero que te haga nada
—Te prometo que no nos dañara— Y le besa la frente

Pasan unos minutos abrazados sin decir nada. Mientras que ella en su delicadeza piensa cual es el mejor camino… pero en los pensamientos de él solo está la palabra “Venganza”
—Kiliam
—Dime mi amor
—La verdad no sé qué pasara mañana, pero lo cierto es que quiero hacer el amor contigo. No sé si sea o no la  última vez… Quiero sentir tus besos y tu ternura, tú cuerpo en el mío ¡Quiero que nos amemos por última vez!
—Pero tu cuerpo esta lastimado y no quiero…

La muchacha ya no lo deja seguir hablando, se pone frente a él y le da un profundo beso. No comprende si realmente lo que quiere es sentir su amor. O solo es un deseo de su mente torturada; ante los varios abusos sexuales del Padre Jerónimo y el amor puro que le da su novio Kiliam

Los besos de ella surten efecto, van calmando el coraje interno del muchacho, poco a poco va aceptando y convierte el enojo en deseo sexual. Se retiran y buscan el lugar más oscuro para asegurase de no ser descubiertos… Aunque… Parece que alguien desde lejos estuvo un tiempo considerable viéndolos desde las sombras; tal vez alcanzo a escuchar algo, tal vez no... Se va sin decir nada

Los chicos por su parte no hacen más que  desatar toda su pasión. Amor que muchos  les han enseñado que es oculta y un aparente pecado. Pero que para ellos los hace ir al paraíso

Ahora los besos son cálidos y profundos, vehementes y con palabras que van desde lo más tierno hasta lo más  fogoso. El hombre parece necesitado de darle todo el amor que a ella pudiera faltarle, y ella a su vez intenta sembrar un paraíso
— ¡Me volverás loca!
—Oh mi cielo, por siempre viviremos de este loco y profundo amor

Mientras que las prendas desaparecen, las manos de los dos descubren sus cuerpos como si fuera la primera vez que se tocan  “Te amo” dice uno “te deseo con toda la fuerza de mí ser” es la respuesta.

Desnudos por fin, se recuestan sobre la  hierba, buscando la posición y le lugar más placentero para que la chica no sufra por los golpes…El olor a frescura y ritmo de la noche se acompasa con la pasión de ambos
—Oh mi cielo
—Oh mi vida Júrame que siempre estarás conmigo— Dice envuelto en pasión Kiliam
—No puedo— dice entre gemidos y loca por la excitación— Esta debe de ser la última vez, no quiero que te hagan daño las personas de Jerónimo

El ya no le contesta nada, delirante por la adrenalina sexual, un plan perverso se le atraviesa «En la guerra y el amor todo se vale» ¿No?:

Besa y acaricia sus senos con gracia y delicadeza. Quiere llevarla al éxtasis poco a poco, tranquilo, sin prisas…Comienza a penetrarla, suave… sabe cómo llevarla al éxtasis… el ritmo comienza más rápido… la adrenalina y el fuego comienza a crecer… Otro poco más rápido
— ¡Oh cielos! —Grita ella
«Es el momento» piensa. Haciendo acopio de su voluntad saca su pene de entre su húmeda vagina— Así no podremos continuar
—No hagas eso— Se exaspera la fémina por su placer truncado— ¿Qué te pasa?
—Lo siento pero se acabó el juego— dice mirándola a los ojos— No quiero continuar si hoy será la ultima vez
—Sigue por favor, ya no puedo detener este fuego que hay en mi interior
—Solo lo hare si me juras que siempre estaremos juntos y seguirás amándome— le habla tratando de aparentar una gran indiferencia
—Oh Kiliam creí que ya te lo había explicado

Intenta besarlo de nuevo. Pero él sabe que se juega el todo por el todo. Hace uso de todas sus fuerzas y se retira ¡Cuantas ganas tiene de estar con ella! :—Ya te dije cuál es la condición que te pongo…
— ¡No seas malo conmigo! ¡Tú no!
—Lo siento mi vida, pero las cosas son así—Dice acariciando su entrepierna para provocar una mayor excitación en la chica
—Está bien— lloriquea la pobre chica—Pero por favor no te detengas
—Júramelo— y acaricia su vagina para darle placer
—Te lo juro pero no te detengas

El muchacho comienza a besarla de nuevo… la pasión está al borde, sus cuerpos compenetrados uno sobre otro sienten la lujuria y el amor de una relación aparentemente prohibida

¡Besos! “¡Te amos!, fuego,  deseo, lujuria… Amor y pasión… Hacen estallar todo en un potente orgasmo. Se dan un gran beso. Reiteran que siempre estarán juntos  a pesar de todo y en camino a sus dormitorios hacen planes de irse mañana al cuarto que el muchacho ha visto y piensa rentar.

La oscuridad es profunda en la habitación del chico, este no puede dormir, su mente está concentrada en el padre Jeremías ¿venganza? No comprende cuantos minutos ¿U horas? Han pasado;  escucha unos ruidos en los pasillos…..

La mañana llega y mientras que la chica es obligada a ir al convento de monjas… Kiliam… Esta con algunos golpes encerrado en un cuarto de castigo……….

— ¡Kiliam! quiero Hablar contigo— Dice la madre superiora quien en ese momento abre la puerta,
Él se vuelve y solo  pregunta — ¿Sunny está bien?
—Está bien, ya  me encargue de eso, pero quiero hablar contigo de algo muy  importante y grave— se sienta junto al muchacho en la rustica banca del pequeño cuarto descuidado, sin ventilación y mal iluminado.
—Este cuarto es horrible, deberíamos ir a la dirección—

Como toda respuesta Kiliam baja la cabeza ¿Tendría caso hablar con ella? ¿Le creerá? Y la pregunta más importante ¿Se pondrá de lado de él o del nefasto sacerdote?
El muchacho no le dice nada más, por lo que ella continua— Me dijeron que tu intentaste agredir al padre Jeremías. Pero yo te conozco desde que eras un bebe. Tú no eres violento ¿Qué te pasó?
—Solo… solo… No puedo hablar. Además que no me  sé si me crea— Dice recordando las amenazas de la madrugada anterior.

La monja lo mira con comprensión. —Sabes que siempre trato de ser justa, además me ha tocado ver muchas cosas en la vida, no temas. Hoy muy temprano hable son Sunny y ella está bien. Ahora lo que me interesa es hablar contigo ¿Sabías que se quiso ir al convento para que tu estés mejor?
—Lo que hizo fue un crimen contra ella misma
—Una mujer desesperada, sola y amenazada puede hacer cosas inesperadas. Pero allá estará bien. ¿Sabías que me  dijo de su intención de ser novicia?
—Eso no es cierto, ella se fue solo para dejar atrás al padre Jeremías
—Yo veré por el bienestar de ustedes, pero te repito que quiero hablar contigo, quiero  saber lo que en realidad pasó— Dice con dulzura la Madre superiora, mientras toca la cabeza de su “hijo postizo” — Sé y tengo algunas sospechas, pero necesito hablar contigo. No me gusta este horrendo lugar. Ven vamos a la dirección. Haya estarás más tranquilo— le da un beso en la frente al joven que está bastante desesperado

El joven sigue a la muchas veces estricta y regañona, y otras dulce y comprensiva Hermana María, en esos momentos no piensa en los golpes de su cuerpo, solo trata de descifrar como es que estaba ayer el sacerdote al que tanto odia y con algunos acompañantes

—Entra— Le dice con su seriedad habitual. Se vuelve con otra de las religiosas que le ayuda y dice— tráeme en una bandeja el desayuno para este  joven. No porque tenga que reprenderlo severamente, significa que no comerá

El joven entra a la rustica dirección, habitación que al igual que el resto del orfanato es muy modesta y tiene lo básico para subsistir. El edificio data de la época de la colonia española. Funcionó como convento hasta hace aproximadamente 5 décadas que fue cuando lo convirtieron en “Casa Hogar”. Siempre se ha caracterizado por el buen trato de las religiosas para con los niños, hasta…hasta hace un par de años que fue cuando el padre Jeremías comenzó con labores de supervisión. Tiempo en el cual… empezó la tristeza para muchas personas

El joven de rostro blanco y cabello color caoba se sienta en la silla esperando lo que él cree será una severa represalia
— ¿Qué tanto amas a Sunny?
—Con todo mi corazón se lo aseguro
— Me dijeron que hace unas semanas quisiste agredir al padre Jeremías
—Sí, lo hice— Dice firmemente— Pero es por… nada
— ¿Qué pasó? Siempre te he considerado un buen alumno y respetuoso, tú y Sunny eran o son los eternos hermanos, pero… Últimamente has cambiado mucho y eso me preocupa
Kiliam guarda Silencio, no esperaba ese comentario
— ¿No tienes algo que decir en tu favor?
—Yo… Bueno,
—Habla con confianza— lo anima la religiosa— te aseguro que te daré un trato justo y correcto. Sabes que te quiero mucho
—Bueno… éramos muy unidos, pero, desde hace un par de meses que nos enamoramos y decidimos estar juntos en secreto….
—Entonces no es la primera vez que tienen sexo
— ¿Cómo lo supo?
—Solo lo sé— Dice con una sonrisa — ¿Qué tanto amas a Sunny?
— La amo de verdad, desde hace ya muchos meses pero hasta hace medio año me anime a declararle mi amor y fui correspondido.
—Cuéntame todo, y también dime porque más o menos en ese tiempo quisiste golpear al padre Jerónimo
—Está bien… Le diré todo— Dice resignado— De todos modos hoy oficialmente seré mayor de edad y saldré de aquí para siempre
—Empieza
—Usted sabe que Ella y yo siempre hemos sido muy amigos, nos comenzamos a contar todo y… No sé exactamente qué es lo que quiere que le cuente de mí. Es sencillamente una historia de amor adolescente como cualquier otra
—Entonces platícame del padre Jeremías y tú
—No se ofenda madre, pero si hoy me van a correr me importa hablar muy poco de ese hombre al que detesto tanto
—Tú no eres el único que lo detesta— le confiesa en tono conciliador— Sé que ha hecho muchas cosas indebidas, y lo único que quiero es proteger a mis hijos (dice refiriéndose a los niños que tiene bajo su tutela)
—Lo que pasa es que a ella una vez la descubrí llorando dentro del cuarto de herramientas, nunca me dijo que le había pasado, pero siempre que se acercaba él comenzaba a  temblar. Pero En ese entonces no, lo supe hasta ayer en la noche
—Y por eso lo quisiste golpear en la madrugada ¿no?
Él solo le mantiene la mirada
—Te cuento que yo quiero mandar a varios de mis niños a otro lugar, o aún mejor sacar al padre Jerónimo de aquí, pero para eso necesito algunos testimonios.

Al chico se le ilumina la cara y decidido comienza a hablar:
—Sunny me contó algunas cosas, sé que el padre Jerónimo cometió atropellos con ella y otras chicas, se dice que también con algunas monjas. Ayer no pude dormir y fue cuando vi al padre Jerónimo fuera, entonces me adentre a su oficina, descubrí una serie de documentos y una libreta que guarde conmigo…  Después llego junto con algunos hombres, me golpearon y creo que recuperaron todo. Pero alcance a leer que ha hecho sus atropellos en reiterada ocasiones. Parece que…— Quiere hablar, pero le tiemblan las manos de coraje— Es más detestable de los que muchos creen

—Cuéntame de la primera vez que lo quisiste agredir
—Una tarde estábamos ella y yo en el jardín cuando el señor ese llegó, hice acopio de todas mis fuerzas por no hacer nada, pues en ese entonces desconocía la magnitud del daño… Cuando él le dijo que quería mostrarle unas cosas ella comenzó a temblar. Yo me ofrecí como acompañante, pero el alego que necesitaba verla sola. Su prepotencia comenzó y cuando la jalo del brazo ahí yo ya no aguante, le refute que no lo hiciera. Nos hicimos de palabras y… bueno lo demás ya lo conoce usted
—Sí, ya veo— Dice pensativa
—Después de eso me amenazó. pero yo no baje la guardia, seguí siendo inseparable de ella. Pero en las noches cuando yo no la podía cuidar por la diferencia de cuartos, creo que él la busco y ¡maldito bastardo! La trató como nunca la había tratado, ayer le varios golpes y…Ahora lo único que quiero es verla y asegurarme que ella está bien
—Cálmate— La madre superiora lo mira con compasión— Tú no eres el único que quiere hacer algo contra él. —pero cuéntame que es lo que harás si la ves.
—Convencerla de que se case conmigo, de alguna manera la podre mantener con mi trabajo
—No todo es tan fácil como lo dices Kiliam, ella me ha confesado su deseo de ser novicia, incluso hace unos días que se lo pregunte por última vez
—Pero ella me ama, estoy seguro que ella esta presionada por Jeremías
—No digas cosas que no sabes, sabes que siempre les he tenido mucho cariño, a ti en especial
—Si… sé que usted es… como mi madre— Y dice esto con un acento diferente
Los ojos de ella brillan y ya no puede decirle nada más
—Por favor, ella es mi única familia y nos amamos
La madre superiora no puede decirle nada más. Escribe una dirección en el papel y se lo da— Si logras convencerla de que se case contigo dale esta carta a la encargada. Es su liberación como Novicia
—Gracias
—Te aconsejo que si la convences se vayan un poco lejos, del padre Jerónimo

Después de una gran silencio Kiliam Continua —Madre… Usted ¿Por qué no hizo algo más por evitar los abusos de ese sacerdote?
—No todo es tan fácil o tan simple como parece— Cierra los ojos
— ¿Acaso a usted también?
—No creo que sea conveniente hablar de ello. Él no es el único abusador del Clero
— ¿Qué?
—Muchas personas creemos que de manos de la religión encontraremos la paz pérdida, pero en el fondo esta Iglesia no es más que una de las poderosas organizaciones a nivel mundial; Abundan los casos de abusos, de corrupción, tráfico de influencias, incluso se hacen tratos con otros tipos de mafias
—El padre Jerónimo no solo lo ha hecho con tu novia… ya son varias las jovencitas que han caído
— ¿Y por qué no lo denuncian a las autoridades?
— ¿Crees que les interese? El estado tiene nexos con el Clero. Están aliados y entre los dos gozan de estos beneficios
—Algo así sabía, pero no creí que la relación fuera tan grande
—Lo que tú puedas ver seria solo la punta del Iceberg

La madre superiora cerró los ojos y le dijo— La verdad es que Sunny hace varios días vino a contarme que estaba muy desesperada, esa vez el padre Jerónimo llegó mucho más lejos, parece que cada vez que estaba con ella la trataba peor. Le estaba rompiendo el alma

El joven parece que está a punto de explotar de coraje— Dígame lo que sabe por favor—
—Ella ya no soportaba más, por eso mismo le dije que el día que se hiciera mayor de edad la mandaría al convento. Hoy en la madrugada estuvimos hablando varias horas. Me conto de su miedo, del amor que se tienen y que nunca te dijo abiertamente para no afectarte ni involucrarte. Lo que hizo fue una prueba de amor.

La madura religiosa hace una pausa y le dice —Pensándolo bien, creo que mejor tendré otro otros planes para ti. Por eso hoy quise hablar contigo, quería estar segura de lo que piensas y de lo que sabes— En tono más serio le dice— Te estimo y admiro por todo lo que has hecho. Y por lo mismo te ayudare. Toma esta otra carta y habla con la persona que escribiré en este papel. No dejes que nadie lo vea, además le pediré si te puede ver ahora mismo. El sabrá qué hacer con ustedes dos
— ¡Gracias! —Dice sin estar completamente seguro de que le entendió

Ella le da un fuerte abrazo y le dice— Lo más seguro es que esta será la última vez que nos veremos, al menos en estas condiciones. Ahora recuerda que te acabo de regañar y tu indignado te vas del orfanato— le guiña el ojo— Espera un momento ahora vuelvo

Demasiada información, demasiado misterio para tan poco tiempo. Kiliam se queda estupefacto ¿Acaso es lo que la religiosa le quiso decir?

Dos horas más tarde el muchacho se presenta con la persona que le dijo la religiosa, habló unas breves palabras con él. Y este solo le dijo
—Tú tendrás otra identidad y tu pareja tendrá otra vida— Le dice con una seriedad absoluta
—A cambio de que
—A cambio de que me ayudes a transportar algo especial
— ¿…Usted está hablando de crimen organizado?
—Te estoy hablando de un modo nuevo de vida sin los abusos del padre Jeremías… Además, puede que pronto llegue su final. ¿Aceptas ser parte de mi organización?
—Acepto— Y centra su atención en el arma de fuego que porta el hombre de negro




Comentarios

Entradas más populares de este blog

HOLANDÉS ERRANTE

CABALGANDO OLAS